El sistema inmune es el sistema de protección que tiene el cuerpo para impedir la entrada de muchas bacterias, microbios o elementos tóxicos que podrían hacernos daño y causar enfermedades. Cuando esta defensa natural de nuestro organismo está debilitada nuestras defensas naturales caen y somos mucho más propensos a enfermar.
Por tanto, podemos decir que la clave para una buena salud es tener un sistema inmune fuerte que nos proteja de cualquier ataque.
Los primeros síntomas de alerta de que el sistema inmune está debilitado son:
-Sensación de cansancio. La persona siente un cansancio que no se corresponde con su nivel de actividad. Incluso se levanta por la mañana ya cansada y sin ganas de nada.
-Infecciones y resfriados recurrentes. Pueden ser de orina, de estómago o de intestino. Cuando no hay suficientes defensas lo primero que comienza a fallar es la parte más débil de nuestro organismo. Por eso hay personas que se resfrían con mucha facilidad, que tienen infecciones de garganta constantes o que parece que no se curan nunca de su infección de orina.
-Malas digestiones. El intestino es una pieza clave en el sistema inmune y por eso es también una de las primeras piezas del organismo en acusar su debilidad. Las malas digestiones, los problemas de hinchazón y los dolores de estómago pueden ser los primeros síntomas de que algo falla.
-Tardar en recuperarse de problemas de salud. Hay problemas de salud pequeños que normalmente tardan pocos días en desaparecer, un malestar por cualquier causa puede durar un día o dos. Pero si no hay defensas que ayuden a combatir aquello que causa el malestar, este puede prolongarse días. Del mismo modo, las heridas van a tardar en curarse y en cerrar totalmente.
Cuando se tienen algunos de los síntomas que se han señalado anteriormente el médico puede pedir que se realice una analítica de sangre para confirmar el estado de las defensas. De todas maneras, las personas que ya han vivido esta experiencia suelen tener muy claro cuando tienen las defensas bajas y toman medidas de forma inmediata para evitar que el problema pueda ir a más.
El médico puede dar algún tipo de tratamiento para subir las defensas pero lo fundamental es el cambio de hábitos en nuestra vida. Estos son los aspectos que más hay que trabajar si se quiere mejorar el sistema inmunitario.
-La alimentación. Es evidente que somos lo que comemos. Cuando comemos mal, abusamos de comida precocinada y platos de comida basura o comemos rápido y a deshora no se le están dando al organismo los nutrientes que necesita para poder realizar con efectividad todas sus funciones. Una comida variada, natural, con horarios regulares y tomándose un tiempo para realizarla es el primer paso para aumentar las defensas.
-El descanso. El cuerpo humano necesita descansar y este descanso debe de ser de entre siete y ocho horas diarias. Si se le roba tiempo al sueño para trasnochar, para trabajar o para cualquier actividad estamos impidiendo que el organismo pueda realizar un trabajo básico, el de recomponerse y prepararse para un nuevo día. El descanso es otro de los pilares básicos para una buena salud del sistema inmune.
-Evitar el estrés. El estrés tiene una incidencia clara, directa y muy dañina sobre la salud. Es cierto que es muy complicado evitar las situaciones de estrés en el tipo de sociedad en el que se vive actualmente, pero es muy importante aprender a gestionarlo. Mente y cuerpo están unidos de manera muy estrecha y cuando algo va mal a nivel de la mente se refleja en la salud del cuerpo. Está demostrado que las personas con altos niveles de estrés acaban sufriendo las consecuencias en sus defensas.
-El ejercicio. El ejercicio es una buena manera de evitar el estrés, de ayudar a una buena digestión y también de conseguir activar el organismo para que funcione correctamente. Practicar ejercicio de manera regular y moderada ayuda también a mejorar el descanso y aumenta las defensas.
-Mejora tu flora intestinal. La flora intestinal juega un papel fundamental en el sistema inmune y por eso, además de los cambios de hábitos ya vistos y la posible mediación que ofrezca el médico también se puede ayudar al organismo gracias a Flora Inmune. Su combinación de probióticos y prebióticos ayuda a regenerar la flora intestinal contribuyendo a mejorar el sistema inmune tanto en su versión para adultos como infantil. Flora Inmune contiene también Vitamina B6, Vitamina B1 y Vitamina B12, L-Glutamina y FOS. Gracias a todos estos ingredientes, la salud del intestino mejorará y esto contribuirá a la buena salud del sistema inmune y al consecuente aumento de las defensas.
Flora inmune se puede tomar sin receta, es compatible con cualquier medicación y se recomienda cada vez que se sienta que las defensas están bajas o en los cambios de estación, para prevenir estos momentos en los que es más frecuente sufrir una debilitación del sistema inmunológico.
